

El Mucem presenta una exposición inédita dedicada a Mayotte, la isla francesa cuya cultura es poco conocida en Francia continental, situada a más de 7.000 kilómetros de distancia, en el corazón de la región del Indopacífico. Tierra de contrastes y de mestizaje, Mayotte se muestra como una auténtica encrucijada cultural, un lugar de múltiples encuentros, a veces conflictivos, a menudo muy fecundos.
De naturaleza volcánica, la isla es un crisol de influencias africanas, malgaches, árabe-musulmanas y austronesias. Todos estos intercambios han moldeado sus idiomas, su gastronomía, conocimientos, creencias y artesanías. Los dhows son unas embarcaciones tradicionales que surcaban los mares transportando especias, oro y esclavos, y también ideas, tradiciones y narraciones.
Typologias
Más de 100 objetos: testigos de la naturaleza, de la arqueología, de la historia, de la etnología, de las obras de arte realizadas, otorgan a la exposición una amplitud excepcional. Entre ellos, rocas volcánicas del
volcán Fani Maoré, que es el volcán más joven del mundo.Testigos recientes de la evolución geológica de la isla, cerámicas arqueológicas, fragmentos de cristal de roca tallados en el archipiélago antes de ser transformados en objetos preciosos del arte fatimí, un esqueleto del “monstruo marino” (un cachalote), una canoa monoxílica, una vela de gran tamaño de embarcación dhow, el decreto original de abolición de la esclavitud, un fitako (silla gestatoria), una kwassa-kwassa, testimonios artísticos, tales como el cuadro La Mahoraise (La mujer de Mayotte) de Didier Valhère, y además, obras inmateriales como las narraciones orales o los poemas de Nassuf Djailani.
Hoy en día, estas antiguas interacciones sociales, pilares de la comunidad de Mayotte, están debilitadas: la globalización, los desastres naturales, la desmaterialización de las relaciones humanas… Los “ancianos” desaparecen, llevándose consigo valiosos conocimientos.
El Mucem presenta una exposición inédita dedicada a Mayotte, la isla francesa cuya cultura es poco conocida en Francia continental, situada a más de 7.000 kilómetros de distancia, en el corazón de la región del Indopacífico. Tierra de contrastes y de mestizaje, Mayotte se muestra como una auténtica encrucijada cultural, un lugar de múltiples encuentros, a veces conflictivos, a menudo muy fecundos.

De naturaleza volcánica, la isla es un crisol de influencias africanas, malgaches, árabe-musulmanas y austronesias. Todos estos intercambios han moldeado sus idiomas, su gastronomía, conocimientos, creencias y artesanías. Los dhows son unas embarcaciones tradicionales que surcaban los mares transportando especias, oro y esclavos, y también ideas, tradiciones y narraciones.
Typologias
Más de 100 objetos: testigos de la naturaleza, de la arqueología, de la historia, de la etnología, de las obras de arte realizadas, otorgan a la exposición una amplitud excepcional. Entre ellos, rocas volcánicas del
volcán Fani Maoré, que es el volcán más joven del mundo.Testigos recientes de la evolución geológica de la isla, cerámicas arqueológicas, fragmentos de cristal de roca tallados en el archipiélago antes de ser transformados en objetos preciosos del arte fatimí, un esqueleto del “monstruo marino” (un cachalote), una canoa monoxílica, una vela de gran tamaño de embarcación dhow, el decreto original de abolición de la esclavitud, un fitako (silla gestatoria), una kwassa-kwassa, testimonios artísticos, tales como el cuadro La Mahoraise (La mujer de Mayotte) de Didier Valhère, y además, obras inmateriales como las narraciones orales o los poemas de Nassuf Djailani.
Hoy en día, estas antiguas interacciones sociales, pilares de la comunidad de Mayotte, están debilitadas: la globalización, los desastres naturales, la desmaterialización de las relaciones humanas… Los “ancianos” desaparecen, llevándose consigo valiosos conocimientos.